se esconde algo
bajo nuestra tierra,
que llora
siglos de sangre:
los brazos baratos
seran por siempre
nuestra condena.
"guardamos un silencio muy parecido a la estupidez",(*)
y es en eso y en nuestra verguenza de subdesarrollo
de admirar la tierra ajena
que el circulo no termina
porque todo se forja en nuestra conciencia.
conocer la historia
valorar lagrimas y sudores
para cambiar los ojos
y cargar la mochila
de ser del "tercer mundo" y honrar nuestra tierra.
(*)Eduardo Galeano,las venas abiertas de america latina.
yo(*)
Pues te felicito porque ciertamente me parece muy lindo lo que escribiste. De paso aprovecho para preguntarte de quién es lo que escribiste en esta entrada, porque en una parte pusiste que es de Galeano... pero en otra parte dice que lo escribiste vos! (?)
ResponderEliminarY síiiiii, es hermosa la película!!! Yo lloré como una desagraciada en la parte del tren, cuando ella lo corre, y cuando él le quería dar un beso y los dos estaban parados... aaay, fue tan románticoooo!
Me impresionó mucho el momento del ascensor que mencionaste, y también el final, cuando B. Espósito volvía a ver a Morales porque había algo que no le cerraba... y entonces ese tal Isidoro ¿Gómez? le decía "al menos dígale que me hable"... NOOOOO, ahí casi me muero, fue terrible.